Los cuentos de hadas han servido como inagotable fuente de
ingresos a la industria fílmica desde casi el inicio de esta como tal, muchos
de ellos adaptados de su contraparte literaria, como La Sirenita, Cenicienta,
La bella durmiente, Pedro y el lobo, etc., otros han sido elaborados para el
cine (y, dependiendo su éxito, su inmediata comercialización a través de
innumerables productos), un ejemplo (que incluso resulta una parodia y burla de
los cuentos de hadas, pero que termina siendo uno, es Shrek, de otras latitudes
tenemos El viaje de Chihiro del japonés Hayao Miyazaki, en México no nos
quedamos atrás, se hicieron películas de Caperucita con extrañas mezclas
cinematográficas donde el mismo lobo era su amigo, acompañado de su inseparable
compinche, el zorrillito, así como Pulgarcito y otros personajes. Pero más allá
de su proceder, es importante saber los números que respaldan algunas de estas
conversiones con el fin de conocer el nivel de penetración que han tenido, aún
incluso, muchos después de su concepción; la versión animada de Blanca Nieves, cuyo
origen data del año 1937 y que fuera llevada
al cine de la mano de Walt Disney, se hizo acreedora de 11 premios, incluido un
Oscar por mejor banda sonora, así como el galardón Saturno en 2002 por ofrecer
el mejor “Box set” en el ramo de los DVD´s, dicha traslación se sitúa como una
de las más triunfadoras de dichas conversiones; esta historia ha sido llevada
incansablemente a la pantalla grande y a la televisión, incluso ha compartido
la puesta en escena con otros personajes de otras series, como los tres
chiflados (Snow White and the three stooges, Walter Lang, 1961), ha tenido
infructuosas secuelas, como Blanca Nieves y el castillo encantado (Happily ever
after, John Howley, 1990), ha prestado su nombre para cintas y personajes que nada tienen que ver con la del
cuento original, como a la drogadicta y libidinosa protagonista de la película Snow White (Snow White, Samir,
2005). Este 2012 la vemos en dos películas, la primera (en orden cronológico de
estreno) fue Blanca Nieves (Mirror, mirror, Tarsem Singh, 2012) y Blanca Nieves
y la leyenda del cazador (Snow White and the huntsman, Ruppert Sanders,
2012) siendo esta última la que será
objeto de este análisis.
En esta versión, a diferencia del cuento original escrito por
los hermanos Grimm, centra parte de su trama alrededor del cazador de Blanca
Nieves, interpretado por el fornido actor que se hizo famoso por dar vida al
hijo de Odin, Thor (Thor, Kenneth Branagh, 2011), Chris Hemsworth. El inicio de
la cinta es relativamente similar al cuento, el rey muere envenenado a manos de
la malvada bruja Ravenna interpretada por Charlize Theron (que este mes también
la vemos en Prometeo de Ridely Scott). Tras el fallecimiento del monarca, y el
descubrimiento de Blanca Nieves del atroz acto, la ciudad se ve asediada por el
ejercito de la malvada mujer, apoderándose de esta manera del noble e
incontaminado reinado que se ante ponía ante la avaricia de la temible
hechicera, algunos suertudos lograron escapar, entre ellos el amigo de infancia
de Blanca Nieves, William, interpretado por Sam Clafin; sin embargo, ella no
corre con la misma suerte y como castigo eterno, es recluida en una celda de
una de las torres del castillo en espera de su destino. Después de tomar la
ciudad, la nueva reina consulta su espejo, de gran tamaño y de un extraño color
dorado, de este emerge una criatura que se desplaza a través de una forma de
metal liquido, como si de mercurio se tratara y que a su vez me recordó el
material con el que estaba constituido el ejecutor del futuro que persigue a
John Connors en Terminator 2, este ente proveniente del espejo la mantiene al
tanto de su belleza, que es lo que la mantiene viva y que debe ser alimentada
con preciosas damiselas vírgenes de quienes absorbe su juventud paea dejarlas
como tristes y debilitadas viejecitas. El siniestro oráculo del espejo advierte
a Ravenna del surgimiento de su nueva competidora, una encantadora jovencita
que acaba de alcanzar la edad necesaria para convertirse en la manzana de la
discordia en cualquier disputa varonil, y no puede ser otra más que la heroína
de la película, Blanca Nieves, que con su belleza y pureza del alma la
convierten de inmediato en la principal enemiga de la malvada reina. Ravenna al
escuchar tal revelación ordena a su hermano Finn (interpretado por Sam Spruell)
sacar a Blanca Nieves de la celda en que se encuentra y llevarla ante ella; por
su parte, nuestra noble protagonista mira por la ventana de su celda a donde
llegan un par de palomas, lo que para ella pareciera ser una revelación, al
intentar acercarse estas vuelan, sin embargo, han sembrado la semilla de la
duda en nuestra heroína, quien descubre que en la parte exterior de la ventana
hay un clavo que puede alcanzar y que le puede servir de arma por si a alguien
se le ocurre entrar a darle un recado o intentar llevarla con la asesina de su
padre, la fortuita situación no podía salir mejor, Blanca nieves escucha subir
alguien por la escalera y rápidamente se hace la dormida para llevar a cabo su
temible osadía, su debut en sociedad venía acompañado de una fuerte dosis de
adrenalina, más aún cuando Finn comienza a acariciar a Blanca Nieves, al que,
en un rápido movimiento, hiere en la cara . Por obviedades fílmicas Blanca
Nieves escapa y es aquí donde inicia su verdadera aventura la cual la llevará a
internarse en escalofriantes bosques embrujados para sortear todo tipo de
obstáculos y temibles criaturas nocturnas,
también disfrutara relajarse en los hermosos bosques encantados,
habitados por siete enanos, hadas, ardillas y todo un mundo de zoología
fantástica, conocerá los gélidos bosques
invernales y un pequeño castillo fortificado que sirve como base de operaciones del grupo rebelde al
reino de Ravenna, poblado de hombres puros e incorruptibles que buscan
restaurar la paz en esas tierras llenas de maldad desde que la bruja comenzó
sus invasiones. Poco después del escape de Blanca Nieves aparece el personaje
entorno a cual girará el destino de esta y que protagoniza uno de los nuevos
rostros de la industria de Hollywood, Chris Hermsworth, quien da vida a Eric el
cazador, presentado como un borracho empedernido, cuyo único propósito
pareciera ser buscar un fatídico destino para reencontrase con su difunta
esposa; sin embargo, antes de cumplir con su funesta misión, la reina Ravenna
se entera de sus atributos como cazador y decide llamarlo para que persiga y
ejecute a una prisionera que acaba de huir, la pobre Blanca nieves, que a estas
altura de la película ya se encuentra en el bosque embrujado, no sin antes
haber sorteado a casi toda la guardia imperial de la reina, ayudada, por
supuesto, de la madre naturaleza, la cual provee a la jovencita con un hermoso
y enorme corcel blanco para hacer más fácil su huida. En el bosque, la ternura y encanto de la bella
jovencita encantan y atrapan al famoso cazador, quien la deja en libertad y
ayuda a huir de los temibles matones de la reina bajo las ordenes de Finn;
durante su fuga, Blanca Nieves y el cazador se encuentran con diversas
criaturas que parecen recordar personajes fantásticos de otras películas (en lo
personal, el Troll - que no se qué hacia una bestia del imaginario nórdico en
un cuento de hadas – me pareció similar al fauno de Del Toro), desde los
temibles árboles y gases tóxicos del bosque embrujado, hasta los tiernos
habitantes del bosque encantado, donde la dulce protagonista encuentra su
destino, su vocación de insurgente contra la malvada Ravenna, destronarla y
terminar con su reinado de terror; sin embargo, Blanca Nieves no contaba con
los misteriosos poderes de la hechicera quien se hace pasar por William, quien
se encuentra con su amiga y amor eterno después de ayudar a liquidar al sequito
de desalmados guerreros que persegu
ían a nuestra noble heroína, entre los cuales iba
encubierto,; con su metamorfosis, Ravenna engaña a Blanca Nieves a quien ofrece
una manzana la cual, obviamente, esta envenenada. Al percatarse de lo sucedido,
Eric y el verdadero William intentan detener infructuosamente a Ravenna quien
se divide en docenas de cuervos que huyen por los aires, a pesar de que algunos
quedan abatidos en el suelo; el cazador y el príncipe trasladan de inmediato a
Blanca Nieves al castillo del segundo donde permanecerá bajo el resguardo de
los soldados rebeldes del imperio.
Hasta aquí podríamos decir que la historia se apega al cuento
de los hermanos Grimm, y es a partir de este momento donde los cambios se
suceden como si de telenovela se tratara, el desconcertante despertar por el
beso de su enamorado acompañado de la revelación de su destino, cosas que
parecen sacadas de la manga del director como el inmediato conocimiento en el
uso de armas medievales por parte de la protagonista, su vacuo discurso a
través del cual convence a cientos de nobles soldados insurrectos para combatir
a su lado como si de una experimentada guerrera se tratara (cualquier
reminicencia con Juana de Arco es pura coincidencia); estos últimos trazos del
director en su ficción no hacen sino acrecentar la sensación de jaladez que
transcurre a lo largo del film, obviando el hecho de que se trata de una
película de corte fantástico, aún así creo que todo tiene sus limites. Aparte
de esto, la cinta parece un collague de otras más, desde las Crónicas de
Narnia, hasta el Robin Hood de Ridley Scott aderezada con algunas chispas de
Corazón Valiente, incluso Matrix tiene su lugar en este multi homenaje fílmico
durante la secuencia en la que vemos a Blanca Nieves acercarse a un enorme
venado blanco que, al parecer, sólo aparece ante invitados especiales en el
bosque encantado, y que es una muestra de pureza y paz, los enanos al
presenciar esto murmullan entre ellos “She´s the one”, como si de la versión
femenina de Neo se tratara.
Por el lado de las interpretaciones no vi una notable diferencia en la
interpretación de Kristen Stewart de su papel de prominente vampira a este, y
es que los dos personajes son muy similares, ambos son puros y cristalinos como
el agua, de belleza y personalidad increíbles, doncellas de virginidad
incuestionada y pureza del alma que pueden poner de cabeza desde un vampiro,
hasta un cazador y un príncipe; la bruja, interpretada por Charlize Theron,
cumple su maléfico propósito durante el film, ayudada en buena medida por efectos
especiales, como su metamorfosis en cuervos, el dorado personaje que habita su
espejo, al cual únicamente puede ver ella; sin embargo, no es un papel el cual
le haya demandado ningún tipo de desgaste emocional; el personaje del cazador,
llevado por Chris Hermsworth, tampoco requirió de mayor trabajo por parte del
actor, quien, a decir verdad, en ninguno de sus papeles recientes ha
interpretado personajes complejos y sufridos, en esta ocasión, su etílico
personaje se enamora perdidamente de Blanca Nieves sin siquiera conocerla; el
príncipe es del mismo calado del cazador, y así con los otros personajes que la
verdad poco transmiten, es más ostentoso el despliegue visual de efectos que
las actuaciones de quienes llevan al cine esta película.
Como mencioné al inicio, los cuentos de hadas han servido en
innumerables ocasiones a la industria cinematográfica para delinear sus
historias, más aún cuando estas se dan por cuenta gotas durante un periodo de
poca creatividad por parte de guionistas y directores, como la que parece estar
sucediendo ahora con la casi incontable cantidad de películas que son remakes,
refritos, tostitos y doritos; el cine
parece estar viviendo momentos de reciclaje, aunque el resultado en la mayoría
de la ocasiones ha sido decepcionante, y aún así la tendencia parece continuar
(a poco más de dos años de haber terminado la saga de Spiderman dirigida por
Sam Reimi ya contamos con la nueva a la vuelta de la esquina, a este ritmo,
pasado el verano podremos escuchar los primeros rumores de quien llevará al
hombre murciélago a nuevas batallas así
como a sus posibles protagonistas). Los cuentos para niños, con estos nuevos
bríos oscuros que directores como Del Toro han impreso en su obra, son
recurrentes formas de hacer cine, sin
embargo, en su abuso esta su fracaso, las películas no tienen que ser contadas
con efectos, tienen que ser contadas con historias que nos hagan pensar, sufrir
o llorar, con personajes que nos dejen algo más que un malestar estomacal, y
directores que sepan a que bosques encantados o embrujados nos quieren llevar.
BLANCANIEVES ES MI PRINCESA FAVORITA!
ResponderEliminarYO CONOZCO ESTAS BLANCANIEVES Y ESTAS MALVADAS MADRASTRAS DE BLANCANIEVES:
ResponderEliminarDISNEY(1937).
GOODTIMES ENTERTAINMENT Y JETLAG PRODUCTIONS(1995).
KRISTEN STEWART Y CHARLIZE THERON(2012).
LILY COLLINS Y JULIA ROBERTS(2012).
KRISTIN KREUK Y MIRANDA RICHARDSON(2001).
ELIZABETH MCGOVERN Y VANESSA REDGRAVE(1984).
TARYN DAVIS,MONICA KEENA Y SIGOURNEY WEAVER(1997).
DIANA RIGG,NICOLA STAPLETON Y SARAH PATTERSON(1987).